La naturaleza nos ha regalado, por medios de las hierbas, la solución para una gran cantidad de afecciones físicas, emocionales y espirituales. Sus poderes mágicos y curativos -ya utilizados en la antigüedad- residen en sus fragancias, colores y formas.
LAVANDA:
Promueve el sueño y la relajación
Destructor de estrés y reforzador del humor
Analgésico
cicatrización de heridas y antiséptico
Crecimiento del cabello
SALVIA BLANCA:
Purifica el ambiente
Purificar, sanar y limpiar el aura
Disminuye el estrés y ayuda a conciliar el sueño
Ayuda a reducir los niveles de estrés y promueve la conexión mente-cuerpo.
ROMERO:
Purificación y Limpieza Energética
Protección
Elevación Espiritual
Purificación de objetos
Conexión con la Naturaleza
